Existen nuevos materiales para conseguir una construcción sostenible
La construcción genera el 40% de las emisiones de carbono a la atmosfera, la fabricación, transporte y uso de los materiales, son la principal fuente del problema. Gracias a la concienciación sobre el cambio climático, muchas empresas buscan alternativas sostenibles a los materiales usados tradicionalmente. A continuación, destacamos algunos ejemplos de construcción sostenible:
Como sustituto de la madera ya existe un producto de fibra natural, está elaborado con cáscara de arroz, aceites minerales y sales, por lo que es totalmente ecológico. Su apariencia es el de la madera tropical, resistente al agua tanto dulce como salada, incluso al cloro, soporta todo tipo de clima desde la nieve a los rayos UV. La ASTM E84 le da una clasificación frente al fuego de clase A. Son reciclables al 100%. Su mantenimiento es mínimo, al instalarlo se le aplica un recubrimiento y el resto de su vida útil se limpia con agua. Se puede instalar en cualquier superficie cubiertas y fachadas, ya que no le afecta la intemperie y dispone de una gran variedad de tonalidades. Sus fabricantes aseguran su durabilidad ofreciendo una garantía en hogares de 25 años y en comercios de 15 años. La empresa, galardonada con numerosas distinciones, fabricante de este producto es RESYSTA y entre sus excelencias destaca que “no se hincha, astilla ni agrieta, no se vuelve gris ni se desvanece y resiste la infestación de plagas”.
El siguiente material es un aglomerante que, al mezclarlo con cemento, es capaz de captar carbono de la atmósfera, durante toda su durabilidad. Su uso reduce los costes energéticos y medioambientales al tiempo que realiza una actividad de limpieza del aire. Se usa en revestimientos de pavimentos y fachadas. Su producción casi no tiene coste energético y su poder de captación de CO2 es del 50% de su peso, además de ser reciclable. Se fabrica partiendo de residuos obtenido en la fabricación del acetileno, optimizados y purificados. Este producto se denomina GeoSilex®, y su patente fue desarrollada por Trenzametal S.L. y la Universidad de Granada.
Otro innovador material de construcción sostenible son los bloques Cannabric, están fabricados con fibras vegetales de cáñamo industrial, cal hidráulica natural y una mezcla de minerales. Tratan de emular las prestaciones térmicas de las cuevas-vivienda en la provincia de Granada, usando muros de carga monocapa, que proporcionan un alto confort térmico, acústico y bioclimático. Su producción es negativa en emisiones de carbono y sus modelos de vivienda tienen muy bajo consumo tanto de calefacción como de refrigeración. Cannabric, fue creado por la arquitecta Monika Brümmer y ha participado en proyectos de arquitectura ecológica y bioclimática, suministrando materiales ecológicos para la construcción o rehabilitación. El único inconveniente es que el precio es algo más elevado que el de los ladrillos habituales, pero si tenemos en cuenta el ahorro energético y medioambiental, son altamente recomendables
La pizarra natural usada tanto en cubiertas como en fachadas proporciona un aspecto inalterable con el tiempo. Su durabilidad se estima en más de 100 años, al tiempo que es un material 100% natural, por lo que, lo convierte en un material de cubierta sin impacto medioambiental. La pizarra es ignífuga, impermeable y soporta temperaturas extremas, al tiempo que evita la formación de hielo.