Los bosques absorben menos CO2

Los bosques y las selvas tropicales son nuestros aliados contra el calentamiento global

El CO2 es esencial para los árboles, lo absorben del aire y lo convierten en energía, a través de la fotosíntesis. Esta energía se transporta por todo el árbol y permite su crecimiento.

Estudios recientes llevados a cabo por Peter van der Sleen, de la Universidad de Wageningen, en los bosques de Tailandia, Bolivia y Camerún, han llegado a una conclusión sorprendente. El aumento de  CO2 no hace que los árboles crezcan más deprisa, pero si, aumenta la cantidad de árboles nuevos. Por tanto, las selvas y bosques tropicales son más densos pero los árboles mayores no están creciendo más como se esperaba.

Los bosques tropicales hasta el momento se consideraban como sumideros de carbono, capaces de eliminar el CO2 de la atmósfera. Pero los investigadores no encuentran explicación al por qué los árboles antiguos no aumentan su crecimiento.

Lo preocupante de este hallazgo es que son los árboles viejos los que tienen mayor capacidad de extraer el dióxido de carbono del aire. Si esta tendencia no se modifica el calentamiento global y el cambio climático tendrá un impacto mayor.

La deforestación y los incendios destruyen bosques y selvas

El profesor Simon Lewis, de la Universidad de Leeds reclama medidas que atajen la deforestación, los incendios y advierte que el cambio climático ya ha empezado y que es mucho peor de cualquiera de las previsiones.

La revista Nature ha publicado un estudio que indica que la selva amazónica absorbe un 45% menos de dióxido de carbono que hace veinte años. Los incendios y la tala de árboles para la ganadería y el cultivo de soja, junto que la sequía que sufren los árboles restantes, no son buenos presagios.

Hasta ahora, las grandes selvas tropicales se han considerado como los grandes vertederos de CO2, pero la tendencia está cambiando. La quema de bosques provoca grandes emisiones de gases de efecto invernadero, aumentando así el calentamiento global. Además, las zonas quemadas o taladas pierden su capacidad de seguir absorbiendo CO2. Cada año la selva Amazónica disminuye la absorción de gases de efecto invernadero en 2.100 millones de toneladas. Por lo que, la selva tropical puede pasar de ser un gran aliado contra el calentamiento global, a convertirse en un emisor de CO2.

Protejamos a nuestros aliados contra el cambio climático

No hay que olvidar que junto con los oceanos, los bosques y selvas son nuestros mejores aliados en la lucha contra el cambio climático. Si continua la destrucción y contaminación de estás zonas pasaran de aborben CO2, a ser una fuente de emisiones de gases de efecto invernadero. La línea es muy delgada y estamos a punto de traspasarla.

Entidades como WWF, Greenpeace y activistas como Mike Childs o el profesor Lewis entre otros muchos, están haciendo una llamada de atención. Todos coinciden en que los bosques y selvas tropicales son cruciales en la lucha contra el calentamiento global, y sin embargo los estamos destruyendo a una velocidad vertiginosa.

Mientras muchos gobiernos mantienen un pasmoso silencio. Necesitamos que se implementen medidas efectivas que no solo pasen por la protección de estas zonas, sino que aborden su restauración.

Artículos que podrían interesarte

La Biomasa, ¿es realmente neutra?

La Biomasa, ¿es realmente neutra?

La biomasa para la obtención de energía debería ser solo transitoria, es decir, un paso intermedio hasta la total implantación de la energía eólica y solar.

Contacta con nosotros

Para nosotros será un placer.

Te responderemos lo antes posible.

info@cuidatuplaneta.org

Visita nuestras redes sociales

    Envíanos un mensaje

    Aviso Legal